1,2,3… y pronto 20 dientes de leche

Cuando los dientes salen pueden causar dolor. La encía se hincha y se rompe para que salga el dientecito. En este periodo, a algunos bebés más afortunados "solo" se le ponen coloradas las nalguitas y sus mejillas. Mientras que otros, sufren más. Aquí tienes, por suerte, algunos trucos para calmar el dolor y para cuidar los dientes del niño.

¿Cuándo salen los primeros dientecitos?

Entre los 6 y los 12 meses, el primer diente aparece. Por lo general en el centro de la encía de abajo, pero no existe ninguna regla al respecto. ¡Incluso hay casos excepcionales en los que un recién nacido tiene dientes desde el nacimiento!

A algunos bebés se les empieza a ver los piquitos de algunos dientes antes, mientras que a otros no les saldrán antes de los 12 o incluso los 18 meses.

Después, el crecimiento dental sigue por lo general un orden predeterminado: en primer lugar los incisivos, después los molares (con 1 año aproximadamente), los caninos (con 2 años aproximadamente) y finalmente los últimos molares (a los 3 años aproximadamente). Tienes que saber que el ritmo de crecimiento de los dientes es diferente en cada niño. No te preocupes porque tu bebé lleve tres meses de retraso con respecto a su primo de la misma edad; el crecimiento de los dientes no tiene nada que ver con el desarrollo.

Señales que anuncian su aparición

Hay pequeñas molestias que anuncian el crecimiento de sus primeros dientes. Por ejemplo, si babea mucho, se queja, se mete repetidamente a la boca la mano o cualquier otro objeto, sin duda es un anuncio de que le está saliendo algún diente.

También otros síntomas como nalgitas rojas, heces blandas, mejillas coloradas. Estas molestias son benignas y no duran por lo general más de 48 horas.

Alivia a tu bebé

Debes saber que existen varios métodos. Averigua cuál de ellos es mejor para tu bebé:

- Pasa suavemente tu dedo limpio por las encías del bebé. Estos masajes alivian el dolor.

- Utiliza un gel calmante especial para los primeros dientes. Puedes conseguirlo en una farmacia.

- Dale un anillo de dentición para que muerda cuanto quiera. Elije mejor un modelo de plástico blando o un anillo refrigerante que se guarda en el la nevera.

- Los mimos, los besos y las palabras tranquilizadoras. Eso también ayuda contra el dolor. ¡No los olvides!

¿El bebé sigue sufriendo? Pide consejos a tu pediatra si las molestias persisten.

Consejos para una sonrisa de cine

¡Cuida sus dientes aunque sean provisionales! De hecho, a los pequeñines también pueden padecer caries y si no se tratan, pueden frenar el crecimiento de los dientes definitivos y debilitarlos. Para evitarlo, adopta buenas prácticas lo antes posible como:

- Evita los caramelos y, de forma general, demasiadas bebidas o productos con azúcar.

- Lava los dientes del bebé desde que salen con un cepillo de dientes adaptado para bebés y un poquito de pasta dental que contenga una pizca de flúor (menos de 450 ppm). De esta forma, ya no es necesario darle un complemento de flúor por vía oral.

- A partir de 1 ó 2 años se debe empezar con el ritual del cepillado después de cada comida. Elige un cepillo de dientes y un dentífrico adaptados a su edad, y procura que se enjuague bien la boca tras el cepillado.

Programa la primera visita al dentista cuando tenga entre 2 y 3 años. El especialista hará un simple control de los dientes y las encías. Además, te recordará las reglas básicas de higiene alimentaria y de cepillado. También es una ocasión ideal para que el niño conozca a su dentista en las mejores condiciones, es decir, sin ninguna intervención dolorosa. Lo mejor es que su primera sea un encuentro agradable.

Hay bebés que parecen no quejarse por nada y otros aparentemente son la mar de susceptibles. No te asustes: las etapas que se muestran aquí varían de un bebé a otro.